ENTENDIENDO LA EFICIENCIA DEL MOTOR
Alrededor del 70% del consumo de energía se debe al funcionamiento de los motores. Es significativo el hecho de que los motores, suministran en su mayor parte, la energía que mueve los accionamientos de una embarcación, por lo que la operación y conservación de los motores en la misma, representa uno de los campos más fértiles de oportunidades en el ahorro, que se traducen en una reducción en los costos y en una mayor eficiencia.

Desde el escritorio de

Manuel Paez

El ahorro comienza desde la selección apropiada de los motores. Siempre hay uno adecuado a las necesidades que se tienen, tanto en lo que respecta a su tipo por condiciones de operación, así como por su tamaño o potencia. Los mayores ahorros se obtienen cuando el motor y su carga operan a su máxima eficiencia.


En una embarcación, la eficiencia o rendimiento de  su motor principal, es una medida de su habilidad para convertir la potencia mecánica disponible en el motor, en potencia de propulsión. Se expresa usualmente en un porcentaje  de la relación de la potencia mecánica disponible y la potencia de propulsión utilizada:



No toda la energía mecánica que un motor tiene, se convierte en energía de propulsión. En el proceso de conversión, se presentan pérdidas, por lo que la eficiencia nunca será del 100%. Si las condiciones de operación de un motor son incorrectas o este tiene algún desperfecto, la magnitud de las pérdidas, puede superar con mucho las de diseño, con la consecuente disminución de la eficiencia.


Para calcular la eficiencia, las unidades de las potencias deben ser iguales. Ya que la potencia mecánica se expresa usualmente en HP, la potencia de propulsión deberá también tener esta misma unidad en HP.

En muchos casos se expresa la potencia de un motor marino en KW, por lo que las siguientes equivalencias son útiles para la conversión de unidades.


1 CP    0.746 kW
1 kW    1.34 CP   


En una embarcación, las perdidas de energía del motor principal son causadas principalmente por:

  • La fricción de los ejes propulsores con sus soportes o chumaceras, las cuales son del orden del 4 al 6%.
  • La fricción de la embarcación al desplazarse por la masa de agua, para lo cual deberá tener un buen diseño de las líneas de forma y poder minimizar las perdidas por ese concepto.
  • Por los obstáculos que el flujo de agua encuentra en su paso como pueden ser estabilizadores mal diseñados, estructuras para protección de hélices, sistemas de refrigeración externos al casco, etc.
Al sumar todas estas perdidas y disminuirlas de la potencia del motor, se podrá encontrar la eficiencia en un porcentaje según la formula arriba expresada.

Por lo anterior existen varias formas de perdidas que reducen la eficiencia  y en la medida que podamos disminuirla ayudaremos al buen desempeño de nuestro motor.

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